Bernie Sanders sobre el comercio internacional
Bernie Sanders opina que la prioridad principal de cualquier acuerdo comercial debe ser ayudar al trabajador estadounidense. Desafortunadamente, tal como Bernie ha advertido año tras año, la política comercial estadounidense durante los últimos 30 años ha hecho precisamente lo contrario. Las empresas multinacionales — que han ayudado a redactar estos acuerdos — se han beneficiado enormemente mientras millones de empleos estadounidenses han sido enviados al extranjero.
Mantener Empleos en Estados Unidos: La política comercial estadounidense debe priorizar las necesidades de la pequeña empresa y el trabajador estadounidense.
NAFTA: Bernie se ha opuesto firmemente a los destructivos acuerdos de «libre comercio», empezando con el Tratado de Libre Comercio de América del Norte (NAFTA, por sus siglas en inglés) en 1993.
Comercio con China: Como con NAFTA, Bernie advirtió en el año 2000 que las Relaciones Comerciales Normales y Permanentes con China la darían ayuda a empresas multinacionales a costa de los trabajadores y el medio ambiente.
Acuerdo Transpacífico de Cooperación Económica (TPP): El TPP continúa la tradición de los anteriores acuerdos comerciales pro-empresariales. Carece de salvaguardias para proteger empleos estadounidenses mientras otorga beneficios masivos a las grandes empresas multinacionales.
Mantener Empleos en Estados Unidos
Bernie ha declarado — en repetidas ocasiones — que su prioridad principal es asegurar que todos los estadounidenses tengan acceso a trabajos bien remunerados. Por esta razón, él ha sido un líder en el Congreso en la lucha contra los acuerdos de libre comercio que se han negociado durante las últimas tres décadas. Lamentablemente para los trabajadores estadounidenses, las fervientes advertencias de Bernie contra estos acuerdos han resultado correctas, ya que estos acuerdos comerciales han enviado una enorme cantidad de trabajos bien pagados al extranjero y han causado el cierre de decenas de miles de fábricas a lo largo y ancho de nuestro país.
¿Qué es un acuerdo comercial?
Los acuerdos comerciales son pactos entre países sobre tarifas, aranceles y comercio — en otras palabras, sobre cómo se realizarán los negocios entre los países que firman el acuerdo. Estos pactos suelen incluir algún tipo de inversión, siendo la más común de ellas el acuerdo de libre comercio o preferencial, cuyo objetivo es reducir o eliminar por completo los aranceles, las cuotas y otros tipos de restricciones entre los signatarios.
¿Por qué está Bernie en contra de la mayoría de los acuerdos comerciales?
Él opina que los acuerdos de libre comercio como el NAFTA, el pacto de Relaciones Comerciales Normales y Permanentes con China (PNTR, por sus siglas en inglés) y el Acuerdo de Libre Comercio con Corea del Sur han resultado en el éxodo de demasiados empleos estadounidenses al extranjero.
En un editorial de opinión en el Huffington Post en mayo de 2015, Bernie explicó:
«Desde 2001, casi 60,000 fábricas en este país han cerrado y hemos perdido más de 4.7 millones de empleos en el sector industrial que pagaban salarios decentes. El NAFTA ha provocado la pérdida de casi 700,000 trabajos. El PNTR con China, 2.7 millones de empleos. Nuestro acuerdo comercial con Corea del Sur ha provocado la pérdida de casi 75,000 empleos. Los acuerdos comerciales malos no son la única razón por la cual los trabajos industriales en Estados Unidos han decrecido, pero son factores importantes.»
¿Es verdad que estos acuerdos comerciales han causado la pérdida de empleos estadounidenses? ¿Dónde está la evidencia?
No necesitas buscar lejos para encontrar evidencia que respalde a Bernie. Aquí se encuentra un estudio del Instituto de Política Económica (EPI, por sus siglas en inglés) que muestra que el NAFTA costó casi 700,000 empleos estadounidenses. Los defensores del NAFTA citan estudios como éste del Servicio de Investigación del Congreso que dice que el efecto neto en la economía estadounidense fue diminuto; sin embargo, este mismo estudio cita el estudio ya mencionado del EPI y explica que «hay tantos ganadores como perdedores como resultado de los ajustes [de comercio].»
Esto es precisamente lo que dice Bernie — estos acuerdos comerciales pueden o no ser técnicamente buenos para nuestro PIB nacional, pero benefician a los propietarios de empresas a costa de los trabajadores estadounidenses. Como Bernie dijo en 1993 en el pleno de la Cámara de Representantes, antes de votar en contra del acuerdo: «El NAFTA puede ser un buen acuerdo para los propietarios de las empresas, pero es un acuerdo malo para los trabajadores estadounidenses, para las familias de agricultores y es malo para el medio ambiente.»
Y Bernie se mantiene constante. Aquí está él, más de 20 años después, advirtiendo en contra del Acuerdo Trans-Pacífico (TPP):
«Seamos claros: el TPP es mucho más que un acuerdo de ‘libre comercio’. Es parte de la carrera mundial hacia el abismo para aumentar las ganancias de empresas grandes y de Wall Street, enviando trabajos al extranjero; debilitando los derechos de los trabajadores; desmantelando las leyes laborales, ambientales, financieras, alimentarias y de salud; y permitiendo a las empresas desafiar nuestras leyes en tribunales internacionales en vez de en nuestro propio sistema judicial.»
¿Cómo propone Bernie conservar empleos en Estados Unidos?
Bernie ha presentado la Ley de Reconstrucción Estadounidense al Senado, la cual crearía más de 13 millones de empleos bien remunerados invirtiendo $1 billón en nuestra desmoronada infraestructura. Se financiaría con la eliminación de vacíos fiscales y de paraísos fiscales corporativos en el extranjero. Consulta nuestra página sobre la infraestructura para más información.
Descubre más sobre el plan de Bernie para crear empleos estadounidenses en nuestra página sobre la Economía y Trabajos.
NAFTA
Estados Unidos no debió promulgar el NAFTA.
Bernie predijo que el NAFTA — que entró en vigor en 1994 —, eliminaría empleos en Estados Unidos y que beneficiaría solamente a las corporaciones multinacionales.
¿Qué es el NAFTA?
El Tratado de Libre Comercio de América del Norte (NAFTA, por sus siglas en inglés) es un acuerdo trilateral de libre comercio entre Canadá, Estados Unidos, y México. El objetivo de esta ley era eliminar las barreras al comercio y la inversión entre los tres países, principalmente a través de la reducción y eliminación de las tarifas (impuestos sobre los productos importados). Fue promulgada en 1993 y entró en vigor el siguiente año.
¿Por qué algunas personas apoyaron el NAFTA?
La liberalización del comercio es una política muy popular tanto con los políticos demócratas como con los republicanos. Es muy obvio que eliminar las barreras al comercio incrementa la cantidad de comercio. Los defensores de acuerdos comerciales como el NAFTA argumentan que el incremento del comercio estimula la competencia, la inversión, la innovación y ulteriormente el crecimiento económico. Gary Clyde Hufbauer y Jeffrey J. Schott, , expertos del Instituto Peterson de Economía Internacional y los autores de NAFTA Revisited: Achievements and Challenges, dijeron eso en la cita siguiente:
«El NAFTA fue concebido para promover el crecimiento económico estimulando la competencia en el mercado interno y fomentando la inversión de fuentes domésticas y extranjeras. Ha funcionado.»
¿Por qué algunas personas se pronunciaron en contra del NAFTA?
Muchos grupos laborales, ambientales, religiosos y de consumidores se opusieron al NAFTA, alegando que crearía «una carrera hacia el abismo en cuanto a salarios, que destruiría cientos de miles de empleos estadounidenses bien remunerados, socavaría el control democrático de la formulación de política doméstica y amenazaría las normas sanitarias, ambientales y de seguridad alimentaria.»
Había una gran preocupación de que el acuerdo podría poner en peligro la soberanía nacional (tal como ocurre ahora con el TPP). Como describió el grupo de defensoría del consumidor Public Citizen, «el NAFTA contenía 900 páginas de regulaciones de ‘talla única’ a las que las leyes nacionales de cada país debían ajustarse — sin importar que los electores y sus representantes democráticamente elegidos hubiesen rechazado las mismas leyes anteriormente».
¿Qué dijo Bernie sobre el NAFTA?
Bernie se pronunció en contra del NAFTA, diciendo que este acuerdo de vía rápida con México «será un desastre para nuestros trabajadores, para nuestros campesinos y para el medio ambiente en general». En 1993, él dijo que, en su opinión, «el NAFTA acelerará todas estas tendencias económicas negativas y solamente beneficiará a las élites gobernantes de Estados Unidos, México y Canadá».
Cómicamente, Bernie puso a sus compañeros Representantes en la mira cuando introdujo un proyecto de ley que dijo que ― si el NAFTA entra en vigor — los miembros del Congreso tendrían que reducir sus propios sueldos para competir con los políticos de México. Aquí aparece Bernie, presentando el proyecto de ley:
¿Cuáles fueron los resultados del NAFTA?
En 2011, mientras hablaba en el pleno del Senado, Bernie les recordó a sus colegas que el Senador Mitch McConnell (R-KY) insistió en 1993 que «las empresas estadounidenses no se mudarán a México, sólo para pagar sueldos más bajos». Bernie entonces señaló cómo, durante los diez años subsecuentes — después de que el NAFTA entrara en vigor — Mattel, Lexmark International, Texas Instruments, General Electric, Tyco Electronics y Levi Strauss despidieron a un total de 3,176 empleados y trasladaron sus maquiladoras a México.
Estudios recientes muestran que, debido al NAFTA, se generó una pérdida de más de 680,000. empleos estadounidenses. Un economista dirigente del EPI afirmó lo siguiente sobre los resultados catastróficos del NAFTA:
«El creciente déficit comercial estadounidense con México ha desplazado una gran cantidad de empleos en Estados Unidos y ha contribuido de forma significativa a la crisis actual en el sector industrial estadounidense, el cual ha perdido 5.6 millones de empleos entre febrero de 2000 y febrero de 2011.»
Comercio con China
Bernie opina firmemente que los acuerdos comerciales de la actualidad con China son perjudiciales para el crecimiento del empleo y la equidad de riqueza en Estados Unidos. Refiriéndose específicamente al TPP en 2015, Bernie criticó los acuerdos comerciales con China como «diseñados para proteger a los intereses de las corporaciones multinacionales más grandes a expensas de los trabajadores, los consumidores, el medio ambiente y los cimientos de la democracia estadounidense».
El creciente déficit comercial con China ha conducido a la pérdida de más de 2 millones de empleos en el sector industrial estadounidense desde 2001.
¿Cuál es el historial de Bernie con respecto a la política comercial con China?
Una y otra vez, Bernie ha votado en contra de acuerdos de libre comercio con China. En 1999, Bernie votó en la Cámara de Representantes en contra de conceder a China el estatus de «País Más Favorecido». En el año 2000, Bernie votó en contra de las Relaciones Comerciales Normales y Permanentes con China — cuyo propósito era crear empleos, pero al contrario condujo a la pérdida de más de 3 millones de empleos estadounidenses.
«Seamos claros: una de las razones principales por las que la clase media en Estados Unidos está desapareciendo, la pobreza está aumentando y la brecha entre los ricos y todos los demás está creciendo más y más, es debido a nuestra desastrosa e irrestricta política de libre comercio.»
Quizás estos acuerdos comerciales no son muy buenos para los estadounidenses, pero ¿no proporcionan millones de empleos para trabajadores chinos?
Bernie rechaza firmemente la idea de que la calidad de vida estadounidense debe ser reducida con el fin de ver una mejoría en la calidad de vida en China. En una entrevista en julio de 2015, cuando se le preguntó sobre las consecuencias de estos acuerdos comerciales para trabajadores chinos, Bernie dijo:
«Quiero que las personas en China vivan en una sociedad democrática con una calidad de vida más alta. Quiero eso, pero no creo que eso deba suceder a costa de los trabajadores estadounidenses. No creo que este país tiene que perder empleos que paguen decentemente como resultado de compañías que cierran aquí y se trasladan a China. Quiero que al pueblo chino le vaya bien, pero no quiero ver a la clase media estadounidense colapsar por ello y yo lucharé contra eso tan fuerte como pueda.»
Entonces, ¿qué propone Bernie que debemos hacer?
El punto número siete de la agenda presidencial de Bernie es acabar con dichos acuerdos. En vez de aprobar acuerdos similares una y otra vez, Bernie argumenta que debemos «desarrollar políticas comerciales que exijan la creación de empleos en este país, no en el extranjero». Visita nuestra página sobre Creación de Empleo para detalles específicos del plan de Bernie.
Adicionalmente, Bernie es un miembro fundador de la Junta Progresista del Congreso (CPC, por sus siglas en inglés) y a veces ha adoptado los documentos de posición del CPC con respecto a acuerdos comerciales. Los principios del CPC sobre el comercio destacan un compromiso para poner al trabajador en primer plano, prevenir la manipulación monetaria y respetar los derechos humanos.
Ve a Bernie discutiendo estos temas en MSNBC:
Acuerdo Transpacífico de Cooperación Económica (TPP)
En fechas recientes, Bernie ha sido un fuerte oponente del Acuerdo Transpacífico de Cooperación Económica — también conocido con el Acuerdo Transpacífico o simplemente como el TPP —, argumentando que «sigue los pasos de otros acuerdos de libre comercio irrestrictos como el NAFTA… [que] han obligado al trabajador estadounidense a competir contra una mano mano de obra desesperada y de bajo costo alrededor del mundo».
¿Exactamente qué es el TPP?
El Acuerdo Transpacífico de Cooperación Económica (TPP) es un acuerdo comercial masivo entre muchos países alrededor del Océano Pacífico, que involucra a 650 millones de personas. Estos países incluyen Australia, Canadá, Chile, Japón, Malasia, México, Nueva Zelanda, Perú, Singapur y Vietnam. Estos países tendrían la capacidad de comerciar entre sí mucho más libremente, sin tener que pagar fuertes tarifas al gobierno para trasladar mercancía.
Espera un momento. Pensé que su nombre era el TPA, o TAA o algo así.
Hay varios proyectos de ley surcando el Congreso como partes diferentes del acuerdo. En esta explicación, podemos apreciar que el TPP es el tratado comercial central, el TPA (Autoridad de Promoción de Comercio) es la parte del acuerdo de «vía rápida» que impide que el Congreso modifique la ley, y el TAA (Asistencia para el Ajuste Comercial) cuya intención es ayudar a los trabajadores que han perdido sus empleos a causa del acuerdo. Datando el 11 de agosto de 2015, más de 90% del TPP había sido negociado.
Refréscame la memoria — ¿cuáles son las desventajas de promulgar reducciones a las barreras comerciales?
Lee sobre NAFTA y el PNTR con China más arriba. Todos los demás acuerdos comerciales han tenido resultados desastrosos para los trabajadores estadounidenses, así que no hay razón para esperar algo diferente esta vez.
¿Algo más?
Como explica la senadora Elizabeth Warren en este artículo, hay una cláusula en el TPP conocida como «Arbitraje de Diferencias Inversor-Estado» (ISDS por sus siglas en inglés) que le permitiría a las empresas presentar demandas contra un gobierno por causar daños a sus ganancias. Esto podría ser fácilmente explotado para inhibir la capacidad de los gobiernos de mantener la seguridad de sus ciudadanos y el medio ambiente. Lo más alarmante es que las demandas serían juzgadas y decididas por abogados corporativos.
Espera. Eso suena descabellado. ¿Cómo puede ser eso cierto?
Aquí está la explicación del Representante de Comercio de Estados Unidos:
Los gobiernos adoptaron el ISDS por al menos tres razones:
- Resolver controversias de inversión sin crear conflicto entre países
- Proteger ciudadanos en el extranjero
- Demostrar a inversores potenciales que el Estado de Derecho será respetado
Aunque eso parece razonable, la historia de demandas presentadas por empresas hacia gobiernos debido a regulaciones de salud y seguridad son suficiente razón para estar preocupados. Un ejemplo inquietante de esto es la serie de demandas por parte de Philip Morris a diversos gobiernos por todo el mundo por sus regulaciones sobre la venta de cigarrillos. Si tienes 20 minutos, mira a John Oliver desenmascarando graciosa e informativamente esa práctica.
Entonces, ¿qué dice Bernie?
Bernie ha expuesto diez razones por las que él, junto con otros progresistas como Elizabeth Warren, votó en contra el TPP, tres de las cuales se enumeran a continuación:
- El TPP permitiría que las empresas enviaran aún más empleos al extranjero.
- Wall Street beneficiaría a costa de todos los demás.
- El TPP no tiene fecha de vencimiento, haciéndolo casi imposible de revocar.
Bernie también se opone a la clandestinidad que rodea al TPP:
«Si el TPP fuera tan buen acuerdo para Estados Unidos, el gobierno tendría el valor de mostrar al pueblo estadounidense exactamente lo que contiene este acuerdo, en vez de mantenerlo en secreto.»
Bernie escribió en un editorial para The Guardian que «el TPP es justamente la continuación de un enfoque fallido para el comercio — un enfoque que beneficia a grandes empresas multinacionales y a Wall Street, pero que es un desastre para la familia trabajadora.»
En 2015, Bernie habló ante el Congreso sobre el TPP:
¿Pero por qué es tan espeluznante que sea un «secreto»?
El TPP se ha mantenido casi enteramente un secreto. El público no ha podido tener acceso al proyecto de ley. El público sólo puede saber lo que ha sido filtrado o explicado por representantes del Congreso. Los miembros del Congreso no pueden copiar o tomar fotos del proyecto de ley y su personal no tienen permitido ver el proyecto.
Bernie ha criticado fuertemente esta clandestinidad.
En esta carta al Representante de Comercio de Estados Unidos, él dice:
«Me parece incomprensible que los líderes de los grandes intereses corporativos, que tienen mucho que ganar de este acuerdo, estén participando activamente en redactar el TPP mientras al mismo tiempo los oficiales electos de este país, quienes representan el pueblo estadounidense, tienen poco o ningún conocimiento de su contenido.»
También explica su opinión en este video:
¿Qué otros grupos se oponen al TPP?
El grupo de sindicatos de AFL-CIO se ha pronunciado en contra del TPP y muchos grupos ambientales, incluyendo la Fundación Sierra, se oponen a la Autoridad de Promoción de Comercio (TPA) de «vía rápida». Médicos sin Fronteras opina que el TPP contiene «reglas que restringirían el acceso a medicamentos asequibles que están salvando millones de vidas» y exhorta a Estados Unidos y otros países a excluirse del acuerdo.
¿Qué pasa con otros países? ¿Acaso no necesitan empleos?
En su artículo editorial para The Guardian, Bernie escribió:
«Dos de los países en el TPP son Vietnam y Malasia. En Vietnam el salario mínimo es equivalente a 56 centavos por hora, los sindicatos independientes son ilegales y la gente es encarcelada por expresar sus creencias políticas o por intentar mejorar las condiciones laborales. En Malasia, los trabajadores migrantes que manufacturan productos electrónicos trabajan como esclavos modernos, a quienes se les han confiscado sus pasaportes y sueldos, y no pueden volver a sus países de origen. Los trabajadores estadounidenses no tienen por qué ‘competir’ contra personas que están obligadas a trabajar en estas condiciones. Esto no es ‘libre comercio’; es una carrera hacia el abismo.»
Entonces, ¿qué piensa Bernie que debemos hacer?
Por supuesto, sería perjudicial para el país cerrarle las puertas al comercio. Bernie opina que los acuerdos comerciales pueden tener éxito, como escribió en un artículo editorial para el Huffington Post en 2007:
«No hay ninguna persona que crea que debemos construir una muralla alrededor de este país. El comercio es algo bueno, pero lo que debemos hacer es negociar acuerdos comerciales justos que reflejen los intereses de familias trabajadoras en Estados Unidos y familias trabajadoras en otros países, y no sólo de enormes empresas multinacionales y de los jefes ejecutivos que ayudan a redactar estos acuerdos comerciales.»
Bernie reiteró esa idea en su editorial para The Guardian este año: «El TPP debe ser derrotado, pero nuestra política de comercio debe cambiar en su totalidad para que las empresas comiencen a invertir de nuevo en Estados Unidos y comiencen a crear trabajos aquí, no sólo en China y otros países con salarios bajos.»
El siguiente pasaje se encuentra en la página senatorial de Bernie: «Reconstruyendo la infraestructura, transformando el sistema energético de Estados Unidos, reconstruyendo el sector manufacturero, y ayudando a la pequeña empresa a crear empleos son las maneras más efectivas de crear trabajos y ampliar las filas de la clase media.»
Para más información sobre la política económica de Bernie, visita nuestra página sobre la Economía y Trabajos.